Los porteños que viven cerca de estaciones de Subte y trenes llegan más rápido al área central que aquellos que habitan cerca de corredores de Metrobús, de acuerdo con un estudio. El relevamiento se basa en datos provistos por Google Distance Matrix y por la aplicación «Cómo llego» del Gobierno de la Ciudad, considerando tres modalidades (bicicleta, transporte público y automóvil). El punto de destino de los viajes simulados fue una dirección del área central: la calle Perón al 400. El impacto del subterráneo puede advertirse en el mapa que acompaña esta nota: en la zona de influencia de las trazas de las líneas A, B, C, D, E y H los tiempos de viaje de los usuarios son siempre inferiores a los 38 minutos de duración. Esto se advierte incluso en las zonas circundantes a las estaciones más alejadas del centro, en los tramos norte de las líneas B y D, por ejemplo. Hasta el primer tramo del Premetro parece tener cierto impacto. En el caso de los ferrocarriles suburbanos el impacto es más bien disímil. Algunas líneas (Mitre, Sarmiento, San Martín y Roca) influyen en una directa reducción de los tiempos de viaje en la inmediata zona de influencia de sus estaciones ubicadas en territorio porteño. En cambio, las líneas Belgrano Norte y Belgrano Sur (más el ramal Mitre de la línea Mitre) parecen tener un muy bajo impacto. Pueden ensayarse diversas explicaciones para esto: la escasa penetración en la mancha urbana del primero y la escasez de conexiones del segundo (que se subsanará con su futura extensión a Plaza Constitución). En el caso del ramal Mitre de la línea Mitre cabe destacar su baja frecuencia, actualmente reducida a un tren cada media hora. La influencia del Metrobús parece prácticamente nula y únicamente podría advertirse en aquellas zonas que ya cuentan con buen acceso al transporte público guiado: el Metrobús Norte (que coincide con la línea D), el Metrobús Nueve de Julio (emplazado en el centro y coincidente con las trazas de varias líneas de Subte) y aún el primer tramo del Metrobús Sur, que coincide con la línea H. En cambio, en aquellos corredores donde el tren y el Subte tienen baja penetración y predominan los carriles exclusivos (Metrobús Sur, Metrobús San Martín y Metrobús Juan B. Justo) no puede comprobarse una disminución de los tiempos totales de viaje. En la zona de influencia de estos corredores los tiempos de viaje al centro oscilan entre 38 y 90 minutos. El mismo estudio revela, inclusive, que en algunas áreas donde predomina el Metrobús (como el corredor de la avenida San Martín o algunas zonas del Metrobús Sur), hasta transportarse en bicicleta es más rápido que utilizar el colectivo. En todo caso, lo que el estudio comprueba es que el Metrobús ha sido una medida muy eficaz para ordenar el tránsito y para mejorar la experiencia de viaje en los colectivos, pero no ha sido igual de exitoso en conformar una real alternativa de movilidad que, tal como afirma el gobierno porteño, supere al Subte.